¡A SENTIR!

¡Hola familias!

¿Cómo están yendo estos días?

¡Espero que lo mejor posible!

Esta semana os proponemos desde el gabinete de psicología una actividad de estimulación sensorial. Los sentidos nos permiten conectarnos con el mundo exterior, el desarrollo de este proceso cobra especial relevancia en la primera infancia, ya que se enfrentan a una realidad totalmente desconocida. Su manera de aprender está fuertemente vinculada a la información que le llega de los sentidos, así como, su capacidad para intervenir en esa situación.

Un ejemplo clásico en el que un bebé modifica la realidad para aprender sería la típica situación en la que tira constantemente un objeto al suelo. Entonces, alguien lo recoge, se lo vuelve a dar y lo tira de nuevo. En ocasiones, esta escena se repite una y otra vez, hasta que el/la adulto decide poner fin al "juego". Obviamente como adultos, depende del momento en el que nos encontremos, vamos a parar antes o después, pero ¿por qué ocurre? ¿realmente quiere que esté el objeto en el suelo?, o, ¿está aprendiendo algo?

Indudablemente, sí. Entre otros aprendizajes, está percibiendo la respuesta social del adulto, lo que le ofrece conocimiento sobre la manera de relacionarse con otras personas; está manipulando un objeto, lo que desarrolla su psicomotricidad; y, por supuesto, está ampliando su razonamiento: si tira un objeto, cae.

Pueden parecer nimiedades, sin embargo, el experimentar promueve su desarrollo integral. Por eso,

 ¡vamos a tocar, oler, saborear, escuchar y ver!

1º paso: elige qué texturas, alimentos, colores, sonidos, etc. No es necesario comprar material específico, en casa tenemos muchos objetos que pueden servir, sólo hay que mirar con otro punto de vista, y ser creativos/as.

2º paso: organiza cómo se los vas a presentar. En niños/as menores, la simple exposición a diferentes estímulos captará su interés. Sin embargo, os recomendamos fomentar su curiosidad y motivación a través de cualquier juego que se os ocurra, aquí os presentamos algunos ejemplos:

-adivina qué es, se le presentan los objetos mientras cierra los ojos, esto le obligará a recurrir a otros sentidos y a su memoria. También podemos crear una caja sensorial, en la que metamos objetos para que investigue, o adivine. Esto puede ser interesante organizarlo en familia, cada hermano/a puede elegir lo que va a adivinar la otra persona. Podemos ir cambiando los objetos para que se enfrenten a nuevos aprendizajes.

-encontrar objetos en texturas, puede resultar muy divertido para hacer en familia. Podemos usar pringues, legumbres, nata, arena, tierra y otros elementos naturales para esconder algo.

 

-Memory, si extendemos diferentes objetos en una superficie plana con dos muestras de cada, podemos cerrar los ojos y tener dos intentos para encontrar la misma textura/ olor/ sonido, etc. 

¡Podemos usar esta actividad para repasar los números contando, repasar y aprender nuevos colores, e incluso para enseñarles sobre la primavera! 

¡A JUGAR!

 Para cualquier sugerencia o pregunta, estaré encantada de leeros al email: psicologia@colegioalbanta.es (OJO: psicologia sin tilde)

¡Despertemos nuestros sentidos!

Feliz semana